jueves, 25 de agosto de 2011

Duende sin trebol

...Y cuando llegó el duende convirtió lo paranormal en cotidiano.
 Con su bolsita de afán echó miserias a la sopa y se apropió de mi casa.
 Las hortalizas perdieron el precio y fueron cambiadas por
 malabares.
 _¡No lo culpes! _exclamó Paciencia.
_Dentro de un caimán perdió su varita mientras odiaba al gigante, y
 fue salpicado sólo con pan.  Repartía optimismo hasta que su luz se
 cansó... ¡Y así está de loco!
 _Lo sé, Paciencia, lo sé.
 _Duende, ¿queda más sopa?

1 comentario:

  1. ¿Qué sería de la Humanidad sin la Santa Paciencia?
    ¿Y si no quedara siquiera la sopa???

    ResponderEliminar